El árbol, con su amanecer, sus flores y su ocaso, apareció frente a los hombres como una metáfora de la vida. El árbol era además el camino ascendente que los podía llevar hasta el cielo que se había alejado. Cielo beatífico en el que reinaba aún una edad de oro, en la cual los hombres hablaban un lenguaje común con los otros seres de la naturaleza y todo era perfecto.
Herencia Textil Andina, Ruth Corcuera
Herencia Textil Andina, Ruth Corcuera
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